LA HORA DEL CUENTO



Enlace al vídeo: “El momento de Kairós literario”. Lectura cuento para niños de 5-6 años:

https://web.microsoftstream.com/video/9080e234-2c72-4940-889c-371ce3757cd3

 

Con Este último Bloque 5 vamos finalizando la asignatura, completando aún más nuestro conocimiento consciente de como llevar la teoría a la práctica y como posibilitar un mejor contacto y acercamiento literario hacia nuestros niños.

Como todos los Bloques resulta mágico y emocionante el hecho de poder ver una doble realidad ante nuestros ojos. Algo que siempre ha estado ahí (pasando un poco desapercibido) se torna ahora, desde nuestra profundización en la materia gracias a la preparación de la lectura, el cuentacuentos o la narración con cuento, una nueva realidad revelada, un mundo posible pero que estaba muy desaprovechado y en otras ocasiones muy mal enfocado (quizá por desconocimiento del docente o por limitaciones y presiones alusivas al tan cargado curriculum).

Para que sirva de orientación ante mi trabajo voy a comentar en las siguientes líneas como lo estructuro y oriento, presentando diferentes apartados/puntos que me parecen importantes trabajar a la par de ser algunos de ellos propuestos por la Guía docente de la asignatura.

Comenzaré con una ligera introducción teórica que ubique y muestre la importancia y el sentido de contar y leer cuentos a los más pequeños, así como conectar el contenido teórico con la actividad; posteriormente en el contenido mostraré la elección del texto y su fundamentación acorde a la edad. Tras este apartado explicaré el proceso previo de preparación del momento/espacio de la lectura del cuento en sus múltiples factores. A continuación, hablaré del desarrollo “planeado” de la estrategia basándome en el Módulo decente y otras ideas tomadas de mi experiencia personal, familiar y escolar por parte de mis hijos, para poder así garantizar, mediante la experiencia, la aplicación de estrategias o acciones lo más acertadas e idóneas posible.

Para completar un poco más el proceso dedicaré un apartado a los aprendizajes personales que he obtenido de todo este proceso, previo a las posibles aportaciones que realicen mis compañeras (ya que este trabajo lo comienzo antes de grabar el vídeo y continúo después de hacerlo), para después poderlo completar con otro apartado referente a lo aprendido, yendo un paso más allá tras los comentarios del vídeo. Me parece interesante realizar esta doble reflexión evaluativa (autoevaluación personal y evaluación según los comentarios de las compañeras) para poder presentar en el blog el proceso personal que he seguido y que ha provocado en mí esta actividad y el taller como tal.

Para finalizar, como siempre, aportaré una conclusión final que probablemente se centre en algún aspecto que llame mi atención o sirva de síntesis de lo vivido en esta experiencia literaria para los niños.

 

INTRODUCCIÓN

La escucha de cuentos es una forma ideal y necesaria para acercar a los niños (y adultos) a la literatura a través de una experiencia apasionante y productiva.

Debido a las características, condiciones y necesidades de los más pequeños esta experiencia resulta más imprescindible y necesaria para ellos, y nosotros como docentes debemos canalizar la realidad para acercarles a este mundo literario de la forma más adecuada y correcta, sabiendo que nuestra labor y aportación es o pude ser decisiva para el sentimiento futuro que los niños tengan a lo largo de su vida sobre la lectura o la literatura en sus múltiples vertientes.

Esta tarea no consiste solamente en ofrecer a los niños una pila de libros sin más, sino que de las capacidades y del interés del docente dependen las posibilidades y formas en que los niños puedan recibir este regalo educativo (entendiendo por educativo el concepto que acoge el despertar del ser humano al mundo desde sus capacidades físicas y mentales-emocionales, artísticas, etc para desarrollarse en plenitud). Es decir, como se dice en el módulo docente, “no convertir este momento íntimo en una ocasión más para “enseñar”. Es hora de que padres y maestros comprendan que la literatura infantil debe ser disfrutable por sí misma” (Labajo, 2020/21) porque en mi opinión dar alas a la imaginación, rienda suelta a los sentimientos, abrir el camino a las conexiones de lo escuchado y lo vivido o procurar momentos de relajación y disfrute (como bien hace la literatura y la escucha de lectura en voz alta) provoca en las personas un efecto educativo en sí mismo que no es necesario forzar ni transformar, sino que lo que aportar este enfoque de la literatura es la posibilidad de completar las necesidades del ser humano como ser emocional, inteligente y espiritual por naturaleza, siendo esto lo que le diferencia del resto de seres vivos.

Una vez descubierta la importancia y las infinitas aportaciones y posibilidades de contacto literario para los niños gracias a esta asignatura podemos ahora centrarnos en pensar e innovar personalmente con diferentes estrategias y lo más importante “disfrutando” de la preparación previa, del placer que esto produce en los niños y de ver resultados palpables hacia el gusto por esta temática. Por todo ello yo doy muchísima importancia a los momentos previos a la escucha del cuento, haciendo vivir intensamente a los niños esa espera, alargando ese momento mediante la introducción, si es posible, de diferentes dinámicas, sorpresas o ambientación temática concreta. ¿Quién no ha disfrutado, por ejemplo, en su juventud de esa carta sin abrir pensando que noticias contendría… y alargado el tiempo antes de abrirla entre las manos sintiendo ese cosquilleo por la intriga e ilusión?, al menos yo sí lo he hecho muchas veces y me gusta hacerlo con los libros. Por ello pretendo ofrecer a los niños esa posibilidad, haciendo un “pre-inicio” del cuento diferente y preelaborado.

Igual que en los adultos, e incluso teniendo más relevancia adaptativa para los niños, es muy importante cuidar el “cuándo y dónde” narrarles o leerles cuentos. Como muchas veces nos ha comentado Irune en clase el estado anímico y las ganas para hacer las cosas deben ser un marcador para acercarnos o no a la lectura o escucha literaria, pues, aunque ésta lleva consigo aprendizajes implícitos o no intencionados lo que se está buscando es disfrutar de esos momentos, igual que nosotros buscamos con ansia un hueco en nuestras ajetreadas vidas para retirarnos a nuestro mundo imaginario con un libro en nuestras manos. ¡Para aprender académicamente ya tenemos otros momentos! Con los niños es necesario procurar ese momento, facilitarles esa oportunidad o ponérselo fácil debido a su aun naciente capacidad comunicativa y de autogestión, por lo tanto aunque pueden aparecer momentos y lugares idóneos espontáneamente los adultos deben ser observadores y receptores de esas ganas y apertura infantil para procurar esos momentos, como dije anteriormente, además dentro de un clima tranquilo y sin cortes o distracciones ajenas a esa actividad.

Por todo ello el docente tiene que estar formado y preparado desde las evidencias científicas que muestran las capacidades y necesidades infantiles en el plano de desarrollo cognitivo y mental, de forma aplicada como nos corrobora M.ª Victoria Guadamillas en su artículo “La formación de los futuros docentes a través de la literatura: los textos literarios desde una perspectivas didáctico-practica”: “Numerosos estudios se fijan en el tratamiento de la literatura infantil en las etapas iniciales (Selfa i Sastre et al., 2015)”, donde se nos muestra como “La literatura infantil es un recurso de gran importancia en las primeras etapas educativas, existiendo diferentes conexiones entre esta y el desarrollo lingüístico y emocional de los niños que nos dan muestra de su magnitud. La literatura se relaciona tanto con el proceso de adquisición y desarrollo de la lengua materna, como con el proceso inicial de aprendizaje de la segunda lengua y su uso y disfrute en el aula queda reflejado en los reales decretos y decretos autonómicos para el segundo ciclo de Educación Infantil y para Educación Primaria” (Gómez, 2015).

Como vemos es de relevante importancia tener conocimientos sobre lo anterior, pues sólo así podemos garantizar ofrecer unas prácticas de lectura, escucha de cuentos, etc… verdaderamente adecuados.

Por otro lado, en el Bloque anterior, desde su Módulo Docente, también se nos orientaba de las condiciones que debe poseer el ambiente como fuente de adaptabilidad y riqueza de experiencia vivida y de las cuales extraigo las íntimamente ligadas a la actividad 5 de lectura de cuentos para observar su necesidad y la gran información que nos aporta para preparar estos “espacios literarios” (como a mí me gusta llamarlos; refiriéndome a espacio no solo físico, sino un espacio y un tiempo de kairós (físico y mental) que abra  a la persona de pleno y desde todos sus sentidos):

“- Ambiente estimulante, motivador y ordenado.

.- Cálido y confortable, próximo al hogar

.- […]

.- Facilitar diversas actividades y elecciones diversas.

.- Evitar las interferencias acústicas, determinado las vías de circulación, los accesos, etc.” (Labajo, 2020/21).

Me gustaría enlazar todo lo anterior a algo verdaderamente esencial para mí; puesto que utilicé la palabra “sentidos” veo imprescindible vincularlo con la necesidad y a la vez la posibilidad de conectar ese momento literario (esa lectura de cuento) con todos los sentidos de la persona (de los niños), pues a través de ellos y en íntima unión con su parte emocional nace la “percepción personal” hacia lo externo, hacia las relaciones, hacia la experimentación … hacia la vida, y en este caso hacia la literatura. No debemos olvidar esos cinco sentidos (¡que pueden ser más de cinco!) para procurar a los niños una vivencia más completa, más real y más soñadora a la vez.

Por todo ello ¿por qué limitarnos a leer o cuidar solo el aspecto oral o incluso el lugar de lectura... si el ser humano tiene puertas a otros sentidos?: puede ver a trasvés de su sentido de la vista (cosas agradables que le provoquen emociones satisfactorias, una ilustración del cuento, un ambiente cálido con colores relajantes, una mirada de afecto de su maestro mientras lee, las caras de ilusión y sonrisa de sus compañeros, ver el libro, sus formas, sus colores, sus letras…); puede oír a través de su sentido del oído (voces suaves y afectuosas que inviten a la tranquilidad y al gusto por lo que se va a hacer, voces diversas que modulen la lectura o la historia contada apasionadamente, las risas al escuchar algo gracioso, el silencio sereno que rodea la actividad o una música suave y relajante de fondo que acompañe el relato, etc.); puede tocar y sentir a través del tacto (sentir la alfombra suave, el cojín blandito, la colchoneta o las telas finas que decoran el ambiente donde están sentados recibiendo el regalo de la lectura, puede tocar el libro físico al finalizar el relato, manipularlo, sentirlo, tocarlo… o un muñeco u objeto relacionado con la historia del cuento, etc); puede oler el ambiente a través de su sentido del olfato (reconociendo el olor de su aula habitual, o el del lugar de la biblioteca en concreto, el perfume de su maestra al estar cerquita contando el cuento, el olor que entra por la ventana o incluso el olor de elementos que la maestra puede haber traído a clase para ambientar el momento acorde al libro: unas piñas piñoneras, unas flores, unas frutas, hierba buena/menta, unos trozos de madera, pan, etc). Podría (y debería) hacerse referencia a la inevitable relación de “muchos otros sentidos” que están en íntima relación con lo que percibimos, y más aún con lo que “queremos hacer que se perciba” mediante la literatura y que sin duda quedará grabado en la mente y los recuerdos de los niños para toda la vida (de ello somos todos conscientes pues estoy segura que casi todos recordamos momentos de la infancia que nos transportan a otra dimensión personal llena de recuerdos agradables y perfectos o desagradables y tristes) por ello debemos cuidar estos primeros contactos con la literatura para que los niños siempre puedan relacionar esos momentos con cosas y sensaciones positivas, garantizando así un buen punto de comienzo por el amor a lo literario y a la lectura, pues como dice Consuelo Santamaría en su libro “Las emociones son cruciales en la manera de percibir. Cuando estamos contentos todo parece bello” (Santamaría, 2017).

Para finalizar este apartado, dentro del cual he decidido centrarme en la parte perceptiva de los niños a través de sus sentidos (puesto que soy consciente de la gran cantidad de cosas a las que  podría hacer referencia según la base teórica Bloque 5 de la asignatura; tengo la tranquilidad de que todos poseemos la información gracias al Módulo docente) me gustaría volver a resaltar la importancia de no olvidar los sentidos como vías de entendimiento y de percepción de lo que nos rodea y que está en inevitable relación con nuestro mundo imaginativo y de ensueño. Por lo que aparte de los sentidos anteriormente citados debemos saber que existen “otros” sentidos por los que podemos hacer penetrar la literatura en los niños como son el ya nombrado “sentido estético, el sentido lingüístico, el sentido del equilibrio mental, el sentido del dolor emocional, el sentido común, el sentido del humor o el sentido de la vida” (Santamaría, 2017), que completan nuestras vivencias.

Y, como no, el docente debe adaptarse a la gran diversidad y a las necesidades personales de cada niño, los cuales pueden tener condicionantes y dificultades de la percepción a partir de cualquiera de los sentidos. El compromiso por buscar las mejores formas y adaptaciones para llegar de la mejor manera posible a todos los niños es un deber del docente en visas del respeto por la dignidad humana.

 

CONTENIDO

Para esta tarea he tomado como bases de referencia las indicaciones que se nos muestran en el Módulo docente donde, concretando más, se nos hace referencia a la importancia de la Interactuación ante el hecho de la narración (ya sea previa, intermedia o posterior al cuento, según la estrategia que sea: lectura, cuentacuentos o narración con libro) para que el niño se sienta partícipe, en la medida de lo posible, de lo que vive. Gracias a esa interactuación posibilitamos de forma adaptada introducirlos en la historia, mantener su atención, comprobar su nivel de comprensión, encauzamos su atención hacia determinados personajes o acciones o asentamos el vocabulario (Labajo, 2020/21), lo cual debe ser meditado y analizado previamente para dotar de mayor sentido la acción de contarles o leerles cuentos.

Debemos por tanto CONOCER a los niños para procurar procesos literarios adecuados y tener en cuenta los diferentes conceptos que se pueden desarrollar, es decir, saber que no es lo mismo leer un cuento (mediante el cual el niño escucha e imagina y tras ello el niño tiene la posibilidad de manipular y ver el libro) que narrar una historia de cuento apoyados en las imágenes del libro, sea de la forma que sea, o hacer un Cuentacuentos en el que se contarían las historias de forma oral sin el libro físico. Puesto que todos poseemos el Material del Módulo docente no me quiero extender más en exponer la teoría explicando cada una de las posibilidades, ya que por su interesante y necesario conocimiento todos ya debemos habérnoslo leído.

 

Para el siguiente trabajo he diseñado, en síntesis, un espacio físico, temporal y sensorial (a modo de sesión completa literaria) que no se reduce a la mera lectura de un cuento sino que se trata de un momento de extrema experimentación con y desde la literatura en íntima relación con las capacidades de los niños y el entrono que nos rodea.

 

      Elección del texto: razones y fundamentación teórica acorde a la edad.

Para esta actividad he elegido un libro literario verdaderamente precioso. He de decir que mi elección atiende primeramente a una razón sentimental, como ya expliqué en el primer bloque, y gracias a esta actividad 5 se ha visto hecha realidad.

He elegido el libro “Adivina cuanto te quiero. AQUÍ, ALLÍ Y EN TODAS PARTES” por ser un texto que me llena sentimentalmente y sobre el que tenía verdadero interés de practicar una lectura lo más adecuada posible para podérselo transmitir un día a mis hijos y a todos mis alumnos de cara a mi futura docencia.

                                                                    Foto propia

FICHA BIBLIOGRÁFICA:

Título:

Título original: “Guess how much I love you here, there and everywhere”

Título en castellano: Adivina cuánto te quiero. AQUÍ, ALLÍ Y EN TODAS PARTES”.

Autor: Sam McBratney.

Ilustrador: Anita Jeram.

Traducción: Gabriela Keselman.

Editorial: Kókinos.

Fecha edición de este ejemplar: 2014

ISBN: 978-84-92750-77-1 Deposito legal: M-25135-2012. Impresión: China.

Fecha 1ª Edición: 1994. Lugar: Reino Unido. Editoriales: Walker Books, Candlewick Press.

Por otro lado, puedo adelantar que la estrategia utilizada será la “lectura” por ser el libro un ejemplar que cubre las características idóneas para este tipo de transmisión, “los libros literarios deben ser leídos respetando exactamente las palabras del autor ya que de su justo empleo y ubicación en el texto surge un encanto poético irremplazable. Si se narran alterando sus palabras, no se alcanzaría, seguramente, el nivel estético en que los ubicó su autor” (Labajo, 2020/21).

La edad escogida para la lectura del cuento “Adivina cuanto te quiero” es la de 5-6 años, aunque desde luego puede aplicarse para edades inferiores y superiores por su accesibilidad, fácil entendimiento y sencillez argumental, compatibles con todas las etapas educativas. Para justificar aún más esta decisión debo decir que existen investigaciones sobre innovación educativa que ya trabajan este libro (hay más cuentos hermanos de colección) desde los cuatro años para trabajar en el aula ciertas emociones como la alegría, contando en su material de trabajo con este título para su desarrollo en el aula (Rodríguez, 2014); además de poseer características temáticas muy atractivas para los niños en cuanto a sus centros de interés. Existen documentos que nacen del estudio de esos centros de interés avalando la importancia que tiene los gustos infantiles ante la muestra de atención y la motivación, como nos demuestra por ejemplo el de “Una experiencia curricular en educación infantil. El centro de interés como metodología”, basado en la “Psicología evolutiva de Piaget y en sus seis estadios evolutivos en el desarrollo de la inteligencia (en este caso destacando el propiamente intuitivo de 4 a 7 años” (Teresa, 1991). En nuestro caso en la lista de centros de interés que se obtiene de dichos estudios aparecen: Los animales, la familia, mi casa, las flores, las plantas (entre otros muchos) lo cual apoya la elección de este cuento como adecuado para la lectura a niños en torno a la edad de 5-6 años.

Por otro lado acudo también a elementos que aparecían en nuestro trabajo anterior (Bloque 4) como factores orientativos que sirven de guía al docente, según la teoría aportada por Irune (Características de los cuentos según la edad y etapa del desarrollo lector, 1990) “podemos encontrarnos niños que ya se encuentren en la fase de pensamiento intuitivo (5-7 años), etapa en la que desarrollan su identidad individual y su autoestima, donde la vida imaginativa cobra aún mayor valor, donde las hadas y los personajes fantásticos les ayudan a proyectar su imagen en héroes por un rato. Además, en esta edad tienen un concepto de moralidad absoluto, experimentan terrores personales y a medida que avanza su evolución, su capacidad de observación en los detalles aumenta” (Grupo-trabajo-Actividad-4, 2021).

Para ir analizando algún elemento más de la idoneidad del cuento dirigido a esta edad y a la vez a la elección de la técnica de la lectura como forma de compartir la historia con los niños paso, a continuación, a fijarme de forma sintética en otros elementos:

-          Es una obra literaria sencilla que favorece la comprensión infantil hacia elementos esenciales y cotidianos de la vida.

-          Posee ilustraciones adecuadas y verdaderamente elaboradas acordes a la calidad literaria que contiene el libro, las cuales podrán ser disfrutadas por los niños durante y tras el final de la lectura. Gracias, por otra parte, al formato adecuado del libro para su posterior manejo por los niños de esta edad elegida.

-          Temática: del interés propio de los niños en cuanto a su despertar en las relaciones interpersonales sostenidas por emociones, afectos, cariño, miedos, necesidades, etc… la naturaleza y nuestra relación con ella o el juego que aparece en su historia, las cuales podrán ser comentadas tras el tiempo de compartir-literario posterior, si los niños así lo desean.

-          Estructura: este libro contiene a su vez cuatro cuentos en su interior que pueden posibilitar el ser leídos los cuatro seguidos a modo de mini-historias con su típico inicio, nudo y desenlace o elegir tan solo un o unos de ellos para ser leídos, en función del interés, el estado o las capacidades/necesidades de los niños.

-          Protagonistas: los personajes son animales (la liebre grande y la pequeña liebre color de avellana) que gesticulan y hablan como los humanos, atendiendo esta características al gusto y acercamiento al pensamiento animista de los niños de esta edad.

-          Valores y contravalores: Respecto a este tema se puede decir que en este cuento abundan los Valores frente a los contravalores por lo que su lectura favorece el desarrollo personal de los niños bajo el fundamento del crecimiento personal integro.

-          Lenguaje: al ser un cuento leído para el deleite de los niños es necesario que atienda a una corrección gramatical adecuada y este texto así lo hace. Por otro lado, posee una sencillez muy adecuada, lo que favorece esos movimientos entre rangos de edad posibles que comenté anteriormente. Ni que decir que la elección de la estrategia (lectura) atiende a esa riqueza constructiva morfosintáctica que contiene, en la que se deben respetar las construcciones literales del texto por presentar una armonía de calidad. Observándose una tendencia de ternura y afectividad continua y a la vez utilizar la función de enriquecimiento poético en su creación en prosa.

Todo lo anterior, por tanto, favorece la idoneidad de este texto para la etapa elegida y la práctica de la lectura.

 

      Proceso de preparación:

La recopilación y la obtención de la información anterior son ya parte de esta preparación, puesto que orientan de la idoneidad y los procesos/posibilidades de relato posteriores. Es decir, gracias a conocer lo anterior puedo (podemos) posibilitar una experiencia literaria más apropiada y a la vez más rica, mágica y de ensueño, que en definitiva es una de las cosas que busca la literatura.

Tras esta primera fase de búsqueda de información teórica para la adaptación del taller literario prosigo aportando las ideas que considero oportunas para la realización del “acto de comunicación lectora” con los niños. Para ello voy paso a paso creando un “plan y un espacio físico-temporal”, apoyándome también en las indicaciones del Módulo docente de la asignatura.

Personalmente me ha resultado más fácil o tranquilizador reflejar la parte, llamémosla teórica, en este trabajo previamente a la realización del vídeo, aunque esta actividad tenga que ser completada y finalizada después de publicar mi vídeo para poder ser subida al Blog.

Con todas las ideas que tenía en la cabeza comencé a recopilar material para construir un “espacio” útil adecuado, donde la lectura literaria estuviera sostenida por las necesidades y gustos infantiles. Puesto que yo no trabajo en ningún Centro Educativo reutilizo y adapto material existente en mi casa sin coste económico alguno (del mismo modo que lo haría en el colegio) a una zona adecuada de mi hogar.

He elegido la parte del fondo de mi salón para adecuar allí el espacio, por poseer toda una pared compuesta por grandes ventanales, un suelo de parquet que proporciona una agradable protección ante el frio y unos muebles de colores cálidos de madera que estéticamente proporcionan una sensación hogareña muy acogedora. Por otro lado, esa zona es la que utilizamos como zona de biblioteca habitualmente en mi casa por poseer espacio suficiente y cestas, estanterías donde ubicamos tanto los libros de los adultos como de los niños. Por otro lado, los ventanales poseen unas largas cortinas en colores tostados suaves que permiten manejar la entrada de luz o sol acorde a nuestras necesidades (he de aclarar que por razones técnicas a la hora de la grabación necesité bajar el toldo e intentar que no entrara mucha luz por los ventanales, utilizando luz artificial, puesto que ello impedía la grabación al incidir la luz de frente a la pantalla. Por esta razón en el vídeo no se puede gozar de esa iluminación natural que tanto nos gusta y que es aconsejable).

Sobre ese espacio, con esos elementos, escojo para completarlo:

-          Un tipie que permite: bien ser punto de auditorio de la persona que lee o bien cobijo para aquellos niños que quieran escuchar. O si no se utiliza durante la lectura puede ser utilizado posteriormente por los niños para ver el libro elegido y manipularlo.

-          Alfombra de pelo largo suave azul turquesa.

-          Alfombra pequeña circular verde que marca el lugar del lector.

-          Pufs varios para elegir a la hora de sentarnos, así como cojines para podernos acomodar al gusto.

-          Una vela LED.

-          Guirnaldas de luz LED.

-          Mantitas para arroparnos.

-          Móvil como objeto manipulado por mi para aportar melodías relajantes y suaves.

-          Cajita reciclada con elementos naturales que aportan olores: hojas verdes, trozo de rama y madera cortada, flores aromáticas, etc.






Para mi preparación:

-    Una cinta con unas plumas para la cabeza y ropa de india confeccionado por mi para con fieltro que yo utilizaba para usos diversos, caracterizando así siempre el personaje del la “India de los cuentos”.

-                  Una vara mágica de bambú para llevar el “atillo” al hombro.

-                  Una bolsa de tela para guardar y transportar el libro y las sorpresas de lectura.

-               Bote de brillantina mezclado con vaselina liquida para simular polvos mágicos que se ponen en la frente para “meternos en el cuento”.






 Una vez organizado todo lo “material y logístico” leo y releo el cuento para entenderlo bien, familiarizarme con las frases, las entonaciones adecuadas, las pausas, los puntos, los personajes y el sentir de la frase que dicen… de esta forma puedo hacer la historia más vivida y transmitirla mejor a los niños. Considero que para aprender desde nuestra inexperiencia es necesario el ensayo.

En definitiva, valoro si tengo que introducir aspectos que permitan su mejor lectura y transmisión literaria y “emocional” hacia los niños, atendiendo a las indicaciones que propone el Módulo docente para la lectura y que nos remiten a lo que se indicaba para el Cuentacuentos, por ser bases fundamentales y válidas para esta actividad. Y cito textualmente: Para leer una historia a los niños de infantil hay que tener en cuenta muchos de los aspectos ya planteados en el cuentacuentos: entonación, ritmo, volumen, expresividad, pausas, interactuación... y además, hemos de leer despacio, claro y vocalizando, aunque sin resultar tediosos. No olvidemos que los niños sólo cuentan con nuestras palabras y con su imaginación para comprender, recrear y disfrutar la historia” (Labajo, 2020/21). Para ello ensayo la lectura como si estuviera con los niños, hasta que vea que controlo lo que quiero transmitir, siendo consciente de que puede ser que en la lectura en directo surjan posibles complicaciones, despistes, olvidos o incidencias que como docente debo saber solucionar y redirigir mediante la improvisación positiva (¡con niños cualquier cosa puede pasar!).

A parte del ensayo de la lectura con el libro físico también preparo una dinámica para todo ese momento previo y final a la lectura, que explicaré en el siguiente apartado, pero dado que en este punto se habla de la preparación enumero aquí las frases y canción que utilizaré en ciertos momentos y que tienen la intención de repetirse en otras sesiones de cuentos del tipo que sean:


-          Al entrar en el aula vestida de india la frase para corear:

“¿Cómo nos lo vamos a pasar?: ¡Cómo los indios!

 

-          Para antes de empezar la lectura, canción obtenida a través de la escolarización de mis hijos:

“Os voy a contar un cuento,

Un cuento chiquirritín,

tenéis que estar muy atentos,

hasta que llegue a su fin”.

 

-          Para finalizar la lectura frase:

“Y colorín colorado … aplaudir si os ha gustado”.

 

Para finalizar este apartado preparo los utensilios de grabación y el soporte “casero” donde lo ubicaré, para realizar la grabación.

-          Una Tablet.

-          Un atril de madera.




Desarrollo de la estrategia.

Partiendo de lo que nos aporta Irune sobre lo que significan las palabras para los niños: “Las palabras, para el niño, están vivas porque nombran la realidad, porque da nombre a objetos y sentimientos; a través de ellas se establecen analogías, se realizan deducciones, se extiende, se precisa, se restringe, se corrige el significado. Es fundamental que el niño escuche y entienda los cuentos que se les leen y que comparta con otros niños esa sensación de emoción, expectación, silencio y comprensión” (Labajo, 2020/21) puedo asentar las bases de mi ACTITUD ante la labor de lectura que voy a realizar, yendo mucho mas allá de esa posible simple lectura ausente de sentido que hubiéramos realizado si hace medio año nos hubieran pedido realizar esta tarea sin habernos formado al efecto, como desafortunadamente ocurre con muchos docentes.

Para afrontar este apartado del desarrollo de la estrategia decido resaltar cómo sería la sesión de lectura literaria con los niños, a modo de secuenciación explicativa, pero previo a ese momento elegido (es decir, lo planifico primero en mi mente), en la medida de lo posible, favoreciendo un espacio de tiempo continuo lo suficiente largo para no sufrir interrupciones y además por ser un tiempo en el que los niños puedan estar predispuestos positivamente para disfrutar y relajarse con los cuentos (duración de entre 15 a 20 minutos, no más), por ejemplo en la hora anterior a la de salir para la comida, por dos razones, porque los niños no estarán con la somnolencia que puede producirse tras comer y porque a la vez a esas horas suelen estar ya cansados y con necesidad de relajarse con algo que les guste.

Sería ideal a lo largo de la semana dejar alguna notita prendida en una flecha de indio por la clase recordando que la India de los cuentos está preparando un cuento muy bonito para escucharlo; y también sería perfecto poder contar con algún objeto, muñeco, figura, etc… representativa del cuento para su acercamiento misterioso, pero eso dependerá del tipo de cuento que se vaya a contar cada vez. Tan solo dejo constancia de esta posibilidad como positiva y motivadora para los niños siempre que sea posible. En este caso yo no tengo dos muñecos de liebre color avellana, pero podría realizarse por el docente alguna manualidad a modo de silueta de fieltro naranja, etc… que pueda, de igual modo, dejarse pillada con las flechas de los indios en algunos lugares del aula, aumentando la intriga de los niños durante los días previos (todo opcional).


                                  Foto: https://www.fdefifidecocraft.com/tutorial-flechas-indios-fieltro/

 

He de aclarar que aunque se pretende preparar un espacio y unos complementos a lo que es la lectura en sí, se debe también tener presente que el resto de factores complementarios y motivacionales no distorsionen o interfieran en el proceso mismo de la lectura del cuento en demasía. Esto es tarea del profesor, puesto que todos somos conscientes de que los niños pueden emocionarse excesivamente en algunos momentos e incluso bloquear por completo la acción de lectura o escucha si les sobrestimulamos o aportamos elementos complementarios exageradamente.

 

Proceso:

Conociendo a los niños receptores del cuento (el educador debe conocer a sus diversos alumnos para facilitarles los procesos y favorecer su motivación y disfrute. En este caso yo conozco a mis hijos que serán los receptores) decido utilizar la sorpresa y la motivación a través de una especie de juego-rol de la India para comenzar con el cuento.

Yo tras vestirme con la ropa y la temática de India de los cuentos entro en la sala (el aula si fuera en el colegio) pronunciando la frase: “¿Cómo nos lo vamos a pasar? Y ellos responden a coro “¡Cómo los indios!! Ahahahahha (onomatopeya pronunciada con la mano sobre la boca, quitándola y poniéndola, diciendo “a”, lo cual encanta a los niños). Esta frase se la expliqué y enseñe previamente puesto que en un aula con sesiones habituales de escucha de cuentos ya la tendrían adquirida y sentida como suya.

Tras esto nos acomodamos bien en la zona dedicada a la lectura y los cuentos (lo ideal que sea una biblioteca de aula perfectamente versátil donde los niños tengan asumido el concepto, las posibilidades del lugar y lo perciban como suyo).

Una vez ubicados cada uno en el sitio que elija nos tranquilizamos y les digo que vamos a escuchar un cuento pero que antes voy a “echarles unos polvos mágicos” para que puedan meterse en el cuento y les pongo un poco de purpurina en la frente con mi dedo (es algo que a los niños les suele gustar mucho).

Les enseño la bolsa y les digo que dentro está el cuento sorpresa que vamos a escuchar y algo más. Les pido que por favor cierren los ojos y saco, con mucho misterio, unos trocitos de madera, unas ramitas con hojas, unas flores, una piña del campo, etc… que tengo en una cajita. Les invito a olerlo y tocarlo (primero con los ojos cerrados) y mirarlo posteriormente para preparar sus sentidos hacia lo que vamos a contar; con el fin de preparar una percepción más completa a través de los sentidos oliendo aromas de la naturaleza donde se ubicará la historia del cuento, como ya comenté en la introducción. Continúo sacando y  presentándoles el libro diciendo el título.

He de aclarar que esta dinámica está mayormente preparada para una situación sanitaria normal, en la que no hubiera problemas de contactos ni manipulaciones grupales de objetos y sin mascarillas, pero para su adaptación al problema actual del Covid simplemente se podrían eliminar o gestionar de diferente forma las cosas que conllevan manipulación conjunta o contacto físico.

Tenemos un momento de interacción y acercamiento temático previa a la lectura a partir del título y la ilustración de la portada, para evitar así también realizar otras interacciones masivas durante la lectura del cuento, dificultando el poder retomar el hilo de la historia (es algo complicado en le estrategia elegida de lectura). Para ello les hago unas preguntas, por ejemplo:

¿Os gustan los animales? ¿El campo?,¿Sabéis que animales son los que aparecen en el libro? Probablemente digan que “consejos” pero podemos aclarar que son liebres y comentar alguna característica de ellas que les cause curiosidad y asombro. Hablamos de que viven en el campo, lo cual hemos olido y sentido con las cosas naturales de la caja. Controlando en no alargar en exceso la conversación porque el tema campestre les encanta a todos los niños y niñas.

Después de esto, de habernos puesto cómodos y comprobado que las luces y velas LED estaban acompañándonos en nuestro momento placentero, cantamos la canción que mostré en el apartado anterior para hacer verdaderamente el silencio. Canción: “Os voy a contar un cuento”.

He de resaltar que en todo momento intento sostener una sonrisa sincera y alegre que aporte comodidad y cariño a los niños. Mis gestos y mi tono de voz deben transmitir no solo el afecto por los niños si no por aquello que estoy haciendo y el amor hacia ese objeto de papel (libro) tan valiosos y maravilloso que nos une en ese momento.

Para la lectura como tal debo señalar, basándome en las indicaciones ofrecidas por el Módulo Docente, que es importante al leer mantener “tanto contacto visual con los niños oyentes como sea posible, sin temer las interrupciones que hacen con frecuencia cuando piden que se les repita un pasaje o se les explique el significado de algún termino cuya comprensión no alcanzan (Labajo, 2020/21). Por ello adopto una postura sentada de frente a los niños pero colocando el libro hacia uno de mis lados permitiendo así el que yo pueda ver las hojas con el texto y mover mis ojos del libro a las niños continuamente y a la vez que los niños puedan ver las paginas del libro con las ilustraciones. Me interesa que vean las imágenes porque este libro de “Adivina cuanto te quiero” tiene no solo una riqueza y ternura importantes en la historia que cuenta sino unas ilustraciones que transmiten una sensación de evasión de la realidad hacia ese mundo imaginario, que el autor pretende transmitir, increíbles.

He de aclarar que este libro contiene cuatro cuentos en su interior que pueden ser contados seguidos a modo de capítulos o pueden tratarse como historias independientes, por lo que para el vídeo de la actividad he decidido escoger el primero y el último para no alargar en exceso la lectura y así dar pie a tener nuevas historias de las liebres color de avellana disponibles para leer en otras sesiones literarias. Además, considero que, aunque la mayoría de los niños de 5-6 años, pueden aguantar perfectamente los cuatro cuantos seguidos, puesto que ya tienen un autocontrol suficiente para ello, es más apropiado no cansarlos y por el contrario dejarlos con un “regustillo” agradable de la escucha.

Puedo parar para hacer aclaraciones si los niños lo precisan, ayudándoles así a entender mejor la historia. Posiblemente donde pone “a ras de suelo”  en la página donde dice: “La pequeña liebre color de avellana apareció retozando (McBratney, 2012), para explicar brevemente el significado de las palabras, como por ejemplo “retozar”. Puedo permitirme hacer esto porque después de esta pausa el texto contiene el desenlace de la historia y los niños no se perderían con el corte de la historia.

Al terminar el cuento utilizo la frase “Y colorín colorado, aplaudir si os ha gustado” (seguro que siempre habrá aplausos o eso espero…).

Para terminar la sesión podemos hablar un ratito del cuento, de la historia o de si algo les ha llamado mucho la atención. Les propongo unas preguntas, dando por supuesto por sus aplausos que sí les ha gustado: ¿Por qué os ha gustado el cuento? O ¿Qué les ha gustado más?, ¿Cómo era la relación de las liebres? O les doy la posibilidad de hacer una especia de resumen de las historias …. Les comparto mis sensaciones para facilitarles su participación personal también. Esta parte no la dejo totalmente planificada y cerrada porque soy partidaria de ir construyendo este espacio final de la sesión de lectura del cuento según vayan los niños interesándose por unas coas o por otras. Considero que es lo lícito y correcto ante nuestro afán de hacerles llegar el disfrute con la literatura y no una mera intención de enseñar conceptos. Al fin y al cabo, este espacio final de cierre sería proporcionarles un momento de rememoración y disfrute de lo vivido durante la escucha al igual que los adultos hacemos cuando terminamos de leer un capítulo o un libro mientras recordamos las sensaciones que la lectura nos ha provocado.

Les doy las gracias por hacer tan inolvidable esta experiencia y terminamos la sesión explicándoles que disponen del libro para verlo y disfrutarlo como quieran, siempre respetando el momento y el cuidado del libro, acompañados por una música relajante que seguro les agradará.

Todo ello, aunque preparado y organizado previamente acorde a las características de los niños que yo como docente debería conocer y tener presentes, puede variar según la respuesta, ánimo y actitud de los niños, por lo que tanto en esta tarea como en cualquier otra soy partidaria de decir que nada está cerrado o es inamovible con los niños, siempre se tienen que tener una respuesta adaptativa a la realidad del momento y de los diferentes contextos; primando siempre el afecto y el acogimiento, lo cual trasciende al hecho de la enseñanza en sí misma dentro de la escuela o de cualquier lugar. Los niños lo primero que perciben es el interés de las personas por ellos por lo que si queremos buscar el acierto en el acercamiento de la literatura a los niños debemos primeramente ofrecerles ese afecto y respeto que se merecen y que ellos asociarán a la lectura o el espacio de lectura desde estos momentos y para toda su vida.

 

Aprendizaje adquirido en el proceso personal.

Supongo que habrá aprendizajes de los que yo aun no sea consciente y otros que ya sí identifico en este momento, como por ejemplo:

-          A no pretender tener preparada una sesión o momento de lectura literaria infantil sin posibilidades de cambio o adaptación a lo que acontezca en el momento. Pues al leer para niños no puede existir un guion cerrado e inamovible. Por lo tanto he aprendido o analizado la necesidad de SER NATURAL Y ESTAR ABIERTA A QUE LOS PROCESOS FLUYAN.

-          Que está bien preparar una motivación previa para la lectura y al escucha pero que quizá introducir demasiados elementos, sorpresas o rituales puede recargar demasiado la actividad literaria (creo que eso se debe de considerar según las características de los alumnos que tengamos e ir controlando las dinámicas, que sigo considerando importantes de aplicar).

-          Que debo estar más tranquila y dejar más espacio a los comentarios de los niños sin aportar tanto mi opinión (aunque reconozco que me acelero cuando se que estoy siendo grabada, por la falta de costumbre).

-          Que el tener una base teórica y formativa sobre la adaptación e idoneidad de los textos literarios para los niños es fundamental para procurar unas experiencias de calidad.

-          Que no hay que desistir en el empeño de conseguir aquello que nos planteamos o proponemos a pesar de que no salga bien la práctica a la primera. Sabemos el gran regalo y beneficio que esta actividad supone para los niños y su crecimiento personal, por ello debemos luchar por conseguir instaurar unas estrategias d calidad y adecuadas poco a poco y no todo de golpe.

-          Que si sientes lo que lees es más fácil transmitir a los niños el verdadero sentido de la literatura y que la motivación del profesor es fundamental para que los niños lo perciban de una forma vivida y que les marque positivamente.

 

Aprendizaje y observaciones referentes a los comentarios aportados por las compañeras que han visto el vídeo.

En este apartado reflejaré las observaciones y consejos de mejora que me ofrecen mis compañeras, como hecho muy valorado por mi al igual que las aportaciones del docente.

Adjunto una síntesis de los comentarios que se me hacen sobre los cuales realizo una explicación de las razones de porqué lo hice de ese modo y no de otro (al igual que he hecho en la contestación a los comentarios directamente en el vídeo) y de esta forma poder valorar cambios y mejoras para las futuras experiencias literarias.

1.       Quizá debiera haber gesticulado o subido más la voz por ejemplo al decir “¡qué alto!” para resaltarlo más.

En lo referente a este consejo estoy de acuerdo y adjunto la misma explicación que di al comentario del vídeo de porque dudé de cómo hacerlo: “respecto a lo que me dices puedo comentarte que estoy de acuerdo contigo, es más, yo suelo gesticular y poner más fuerza o énfasis en lo que leo para los niños porque me sale por naturaleza pero es cierto que esta vez al preparar ese momento de lectura desde la teoría aportada por la asignatura me encontré un poco con el dilema de qué hacer, ya que en la última parte del Modulo docente 5 existe un último apartado titulado "La técnica de la lectura oral aplicada a Educación Infantil" donde ponía: "Pensemos, por otra parte, que éste es un importante contacto con la lectura, por tanto, tenemos que servir de ejemplo y leer como leeríamos a un adulto, es decir, sin cambiar las voces de los personajes y sin exagerar las entonaciones (sobre todo las de las oraciones interrogativas).

Puede pensarse que la comprensión se reduce si no se utilizan estos recursos, pero no es cierto. La comprensión depende del texto, que debe estar bien elegido y oralizarse como se habla, sin sobreactuaciones” (Labajo, 2020/21) y la verdad es que me forcé para hacer mi lectura más normalizada dudando un poco de hasta dónde podía o no llegar. Quizá al final me decanté por frenar demasiado mi gesticulación... Pero lo tendré muy en cuenta para futuras experiencias como algo que mejorar y adaptar intuitivamente al momento que entre todos (niños y yo) construyamos.

 

2.       El formato y la técnica de grabación vertical no era la apropiada para después publicar y ver con detalle/claridad el contenido del vídeo.

Estoy totalmente de acuerdo con el consejo y entiendo perfectamente la mejora que hubiera provocado el hacerlo en horizontal por todas las razones obvias. Si bien es cierto que cuando lo grababa con la Tablet aparecía a pantalla completa y yo lo veía perfectamente por lo que no imaginé que se viera después tan reducido en la vista definitiva, lo cual me sorprendió. Ello es debido desde luego a mi poca experiencia y control técnico audiovisual. Lo cual es a partir de ahora un punto de interés de mejora en mi camino de aprendizaje.

 

Debo agradecer en este apartado la ayuda aportada por la cooperación en grupo que nos ha ofrecido Irune con este sistema de trabajo.

 

Mejoras que introduciría y por qué.

Aquí reflejo las mejoras que aplicaría al video y en futuras experiencias acorde a las correcciones coherentes de mis compañeras:

1.               Sobre este aspecto buscaré un punto intermedio entre la corrección lectora y gestual y la necesidad de enfatizar y marcar ciertas frases y acciones puntuales con el fin sobre todo de enganchar y apasionar a los niños con la historia, puesto que como dice el Modulo docente un exceso de recursos de transmisión oral (cambios de vos, tono, etc…) no limita el entendimiento de la historia. Por lo tanto en el vídeo sí hubiera dejado fluir un poquito más mi reacción natural entonativa y gestual, pero sin necesidad de exagerar.

2.               Sobre este tema audiovisual técnico estaré más pendiente y me formaré y buscaré mejores formas para acertar con el efecto deseado según el objetivo del trabajo grabado. Por lo tanto debería haber grabado el vídeo en posición horizontal de la Tablet con el fin de proporcionar una imagen más correcta y estéticamente adecuada, permitiendo así el poder apreciar muchísimos detalles simbólicos, gestuales, etc… que han quedado perdidos o pasado desapercibidos lamentablemente.

 

CONCLUSIÓN

Tras esta experiencia apasionante podría decir que estamos ahora un paso más cerca de ese docente preparado para coger la antorcha de responsabilidad que enciende la llama del amor y el interés por la literatura desde unas formas más apropiadas y eficaces.

No deberíamos olvidar nunca que el ser humano vive porque se alimenta y nutre su cuerpo pero que necesita, como ser “pensante” y “sintiente”, alimentar sus necesidades de ensueño y de imaginación, no sólo por el hecho de colmar una necesidad emocional o sensitiva sino que en los niños es además una necesidad importante para su desarrollo y evolución en los procesos mentales y cognitivos, así como en su crecimiento personal, en un mundo rodeado de otros seres que interrelacionan con ellos. Es cierto por tanto que “No solo de pan vive el hombre” y la literatura es uno de los mejores alimentos del alma.

Me parece buena idea redireccionar o cerrar esta conclusión, si a Irune no le parece mal, hacia su vídeo narrado por ella misma que nos ofrece en el enlace a través de Teams, por si alguna compañera/o no lo ha visto. Creo que es tan maravilloso y emotivo ver y escuchar lo que ese vídeo nos dice con la voz cálida de la profesora que no encuentro mejor final a este Bloque y realmente a esta asignatura, pues no podría encontrar palabras más profundas para hablar de lo que en esta asignatura estamos viviendo:

“Rincones para enamorarse de los libros”:  https://web.microsoftstream.com/video/21e3d860-aabe-44eb-88d0-7ca2e206f137?list=trending

 

Muchas gracias por vuestra atención.

Un saludo para todo aquel que lo lea y vaya paso a paso...libro a libro.

             Virginia

 

 

Bibliografía

 

Gómez, M. V. (julio de 2015). La formación de los futuros maestros a través de la literatura: los textos literarios desde una perspectiva didáctico práctica. Investigaciones Sobre Lectura(4), 93-106. Obtenido de file:///C:/Users/ADMIN/Downloads/Dialnet-LaFormacionDeLosFuturosMaestrosATravesDeLaLiteratu-5155204.pdf

Grupo-trabajo-Actividad-4. (25 de abril de 2021). Paso a paso... libro a libro. Recuperado el 29 de abril de 2021, de https://pasoapasolibroalibro.blogspot.com/

Labajo, I. (2020/21). Literatura Infantil. Madrid: Universidad La Salle.

McBratney, S. (2012). Adivina cuánto te quiero Aquí, allí y en todas partes. Madrid: Kókinos.

MEC, C. d. (1990). Características de los cuentos según la edad y etapa del desarrollo lector.

Rodrigez, P. M. (2014). Investigación e Inovación en Educación Infantil. f SENECA+. Murcia: Editum. Obtenido de file:///C:/Users/ADMIN/Downloads/Dialnet-InvestigacionEInnovacionEnEducacionInfantil-684052%20(1).pdf

Santamaría, C. (2017). Pedagogía de los sentidos. (C. d. Salud, Ed.) Madrid: PPC.

Teresa, M. F. (1991). Una experiencia curricular en educación Infantil. El Centro de Interés como metodología. Revista Universitaria de formación del profesorado nº 10. Obtenido de file:///C:/Users/ADMIN/Downloads/Dialnet-UnaExperienciaCurricularEnEducacionInfantil-117742.pdf

 

Comentarios

  1. Hola, Virginia. Quería decirte que estoy impresionada con tu publicación, ¡qué bien escribes! ¿Te has planteado continuar con el Blog cuando terminemos la asignatura? !Se te da fenomenal!!
    Me ha encantado cómo has explicado la preparación y realización de la actividad con todo detalle, creo que transmites mucha pasión en lo que haces. En el vídeo se te veía disfrutar mucho de lo que estabas haciendo y tus hijos fueron un público maravilloso.
    La idea de que la India de los cuentos deje notitas con flechas a lo largo de la semana me ha parecido genial.
    Se nota que has preparado muy bien toda la fundamentación de la lectura del libro y así lo reflejas en esta entrada. Es difícil darte sugerencias para mejorar porque está perfecto, por eso solo quería señalarte algunos errores en ortografía que he visto mientras leía tu entrada. En la cita de Consuelo Santamaría (ahí falta tilde): "Las emociones son cruciales en al manera...." Imagino que es "la manera". Cuando aclaras que el libro tiene cuatro cuentos, falta la tilde en la palabra "último" y en la palabra "partícipe" que aparece en uno de los párrafos anteriores. Por último, aparece varias veces la palabra video sin tilde y, aunque está aceptada, en España se suele utilizar como palabra esdrújula, vídeo, tal como lo pronunciamos. Disculpa, por ser tan quisquillosa con estas faltas, pero como te he dicho antes, son los únicos fallos que podía comentarte para mejorar. De verdad, enhorabuena por tu trabajo, y ánimo para seguir escribiendo, lo haces muy bien.
    Un saludo.

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  2. Buenas noches compañera.
    Muchas gracias por tus ánimos y por transmitirme el que te haya gustado mi trabajo. Mejor o peor hecho puedo decirte que sí es cierto que lo hago con toda la pasión e interés que puedo. Este me gustó mucho realizarlo y lo hice de esta forma en concreto, porque me sirvieron enormemente los Bloques anteriores para ir "unificando" ideas e "integrándolas"; y creí que en esta última tarea se podía plasmar y materializar todo lo anteriormente aprendido para que fuera más completa y acorde con la línea de la asignatura..
    Gracias por tus anotaciones sobre la ortografía, no me extrañó tu comentario porque soy consciente de que estas ultimas semanas el tiempo apremia ante los exámenes y trabajos por terminar y el repaso antes de subirlo al Blog no fue tan sosegado y meticuloso como otras veces. Ya está corregido, gracias de nuevo, porque para mi también es muy importante tener bien ese tema ortográfico siempre y esta vez, tanto en este Bloque como en el artículo final, es cierto que me quedé con la sensación de no haberlo revisado al 100%, pero como te decía a estas alturas de curso no me da mucho más desí el tiempo.
    La verdad que esto del Blog es un descubrimietno muy bonito pero me queda mucho por aprender para poder aportar cosas de calidad.
    Un saludo y suerte con el final de curso.
    Virginia

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  3. Perfecto, Virginia. Me alegra que te haya gustado el vídeo :)

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